Los altavoces inteligentes han pasado de ser una novedad a convertirse en un elemento cotidiano en muchos hogares. Equipados con asistentes de voz, permiten reproducir música, consultar el tiempo o hacer compras online.
Entre ellos, Alexa, de Amazon, lidera el mercado gracias a su versatilidad y su integración en múltiples dispositivos. Sin embargo, lo que pocos usuarios conocen es que estos asistentes también pueden convertirse en un riesgo para la ciberseguridad y la privacidad.
Grabaciones inesperadas: cuando Alexa escucha más de la cuenta
Un experto en ciberseguridad reveló en un vídeo viral en TikTok que, tras solicitar a Amazon un informe con todos sus datos almacenados, recibió más de 500 archivos. Entre ellos se incluían grabaciones de todas sus interacciones con Alexa.
Lo alarmante fue descubrir registros de audio generados sin haber pronunciado el comando de activación, lo que indica que el dispositivo podría haber grabado conversaciones privadas sin previo aviso.
Aunque Amazon asegura que no utiliza estos datos de forma indebida, una brecha de seguridad en sus servidores podría exponer información crítica como nombres, direcciones, correos, tarjetas bancarias e incluso archivos de voz. En manos de ciberdelincuentes, estos datos permitirían desde estafas telefónicas hasta la apertura de cuentas falsas.
📑 Más información:
Cómo consultar y controlar tus datos de Alexa
Amazon permite a los usuarios acceder a la información que almacena su asistente de voz siguiendo estos pasos:
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Iniciar sesión en la cuenta de Amazon y entrar en Mi Cuenta.
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Acceder a Gestionar tus datos.
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Seleccionar Solicitar tus datos y marcar qué información recibir.
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Esperar la respuesta de Amazon (puede tardar varios días).
Además, es posible evitar que Alexa registre todas las interacciones modificando la configuración de privacidad:
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Ir a Dispositivos > Configuración de Privacidad.
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Seleccionar No guardar nunca en el almacenamiento de grabaciones.
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Eliminar los registros previos guardados en la nube.
Un dilema de privacidad digital
Los asistentes de voz facilitan la vida diaria, pero también generan un dilema: ¿hasta qué punto estamos dispuestos a ceder nuestra privacidad a cambio de comodidad?
La ciberseguridad debe ser parte de esta ecuación. Los usuarios necesitan comprender que los datos recopilados por estos dispositivos, si caen en manos equivocadas, pueden convertirse en una amenaza real para su privacidad digital y seguridad personal.
