El Black Friday se ha consolidado como una de las fechas más importantes para el comercio electrónico. Sin embargo, junto al aumento de las compras en línea también crece el interés de los ciberdelincuentes. Una de las técnicas más peligrosas en estas campañas es el e-skimming, un método invisible para robar datos bancarios y personales mientras los usuarios realizan pagos online.
¿Qué es el e-skimming?
El e-skimming consiste en introducir código malicioso en páginas de pago de tiendas online. Este software captura la información sensible de los clientes —como números de tarjeta, direcciones o credenciales— y la envía a los atacantes sin interrumpir el proceso de compra.
Su peligrosidad radica en que todo parece normal: la transacción se completa, pero los datos ya han sido comprometidos y pueden acabar en mercados ilegales.
¿Cómo se produce un ataque de e-skimming?
Los ciberdelincuentes suelen entrar a las plataformas de e-commerce de dos formas principales:
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Explotando vulnerabilidades del software no actualizado.
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Engañando a los administradores mediante correos fraudulentos (phishing) para robar accesos.
Una vez dentro, insertan el código malicioso que operará de forma silenciosa.
Consecuencias para tiendas y clientes
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Para las tiendas: pérdida de reputación, sanciones legales por incumplimiento del RGPD y caída de ventas por falta de confianza.
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Para los clientes: robo de datos financieros, fraudes con tarjetas y posibles suplantaciones de identidad.
Cómo protegerse del e-skimming
Para comerciantes:
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Mantener el software de la tienda siempre actualizado.
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Usar contraseñas robustas y habilitar la autenticación en dos pasos.
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Revisar periódicamente el código en busca de cambios no autorizados.
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Contratar servicios externos de seguridad que monitoricen la plataforma.
Para consumidores:
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Comprar solo en sitios web de confianza.
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Verificar que la conexión sea segura (https:// y candado en el navegador).
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Evitar introducir datos innecesarios.
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Utilizar tarjetas virtuales o sistemas de pago intermedio (PayPal, Bizum).
Conclusión
El e-skimming en Black Friday es una amenaza silenciosa que puede afectar tanto a consumidores como a comercios. La prevención, la actualización constante y la concienciación son las mejores armas para proteger los datos en fechas de alto consumo digital.
📑 Fuentes y enlaces de interés:
